Al Ayuntamiento de Almería, a Aqualia y a la Comunidad General de Usuarios de Aguas de la EDAR de El Bobar (CGUAL) les ha salido la factura del agua del pasado año 2023 a devolver. Así se ratificaba en la Junta de Gobierno Local del pasado 19 de abril cuando se llevaba a aprobación “la revisión de precios del año 2023 y su aplicación para el año 2024” de la concesión administrativa de la construcción y explotación de la desaladora de Almería que gestiona la UTE formada por Acciona Agua S.A.U. y Abengoa S.A.
Según consta en el acta de esta Junta de Gobierno, ya estaba establecido el cuadro de tarifas según estuvieran en marcha dos, tres, cuatro, cinco, seis o siete bastidores y el cuadro de precios para CGUAL, y a partir de ahí se procede a la liquidación de las cuentas con todos aquellos que consumen agua de la desaladora de la capital.
Teniendo en cuenta esos precios, se revisa la facturación que la concesionaria de la desaladora había emitido a la adjudicataria del servicio de agua potable y alcantarillado, y se estima que “la UTE Acciona Agua-Abengoa ha de realizar un abono a FCC Aqualia de 2.202.506 euros (IVA incluido)” al ser superior el dinero que había pagado al coste real de la liquidación.
Ayuntamiento
Pero en esta liquidación no solo tiene que devolver dinero la concesionaria de la desaladora a Aqualia, al Ayuntamiento de Almería también le ha cobrado por encima de lo que después se ha liquidado. En este caso la devolución asciende a 924.363 euros con el IVA incluido.
A los que también tiene que devolver dinero, aunque el importe es bastante inferior, es a los miembros de CGUAL. A ellos la liquidación le sale 38.732 euros a devolver.
De momento los precios que están establecidos son los mismos que se seguirán en 2024 pero con el incremento del coste de la energía, si bien, aún no hay nada decidido sobre la necesidad de subir el precio del agua a los ciudadanos. Se sabe que será algo que tocará pronto, pero de momento no hay nada cerrado, explican fuentes municipales.
La obra de Castell, lista en unos días
La próxima semana prevé tener lista la obra que llevará, por fin, el agua potable de la desaladora de Almería hasta todos los puntos de Pescadería y Castell del Rey que actualmente siguen consumiendo a través de cubas desde mediados de diciembre cuando se declaró el agua no apta para consumo.
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